Los docentes utilizan diferentes herramientas en sus clases para estimular el aprendizaje y potenciar las capacidades cognitivas de sus estudiantes. Una de estas herramientas son las llamadas “preguntas retadoras”, pero ¿de qué se trata? Se trata de interrogantes que normalmente prepara y plantea el docente con el objetivo de generar un conflicto cognitivo, un nivel de problematización que motive, estimule y predisponga la puesta en práctica de las capacidades cognitivas de los estudiantes.
En esta publicación te hablaremos con más detalle acerca de las preguntas retadoras, su importancia y algunos ejemplos que los docentes suelen usar en clases.
Contenido
Importancia de las preguntas retadoras
Las preguntas retadoras son aquellas que no tienen una respuesta simple como “sí” o “no”; por ello, para que los estudiantes puedan responderlas necesitan un mayor nivel de exigencia y de análisis de lo que pide la pregunta. Aunque son preguntas más profundas, tampoco tienen la intención de obtener juicios o sentencias, procura la reflexión crítica del estudiante, hipotetiza posibles alternativas de respuestas, analiza diversas aristas, concluye y toma decisiones; es decir, desafía sus capacidades de aprendizaje hasta encontrar su verdadero nivel potencial.
Al utilizar preguntas retadoras en clase, los estudiantes desarrollan valores como la responsabilidad y el empoderamiento; además, como no hay una respuesta única, también les impulsa a ser más imaginativos, creativos y proactivos. Asimismo, reflexionan críticamente sus capacidades de aprendizaje y lo alejan de la creencia de que existen verdades absolutas.
Algunos ejemplos de preguntas retadoras usadas por docentes
Existen diferentes preguntas retadoras que se pueden formular en clase; incluso podríamos dividirlas en algunos subtipos; por ejemplo:
- Preguntas lógicas, las cuales estimulan el pensamiento crítico. Aquí se encuentran preguntas como: “¿qué piensas acerca de este tema?”, “¿qué pasa si te digo que esto no es verdad?”, “¿qué puedes decir en contra de esto?”, “¿qué argumento tiene más sentido y por qué?”, entre otros.
- Preguntas literarias, a través de las cuales podemos adoptar el rol del personaje o del autor y responder; algunos ejemplos de este tipo de preguntas son: “¿cómo cambiaría la historia si fuera desde el punto de vista del antagonista?” o “¿Cómo cambiarías el final de la historia, por qué?”
- Preguntas de ciencia o temas sociales, entre ellas: “¿qué información es más importante?”, “¿qué evidencia existe de que esta afirmación sea factible?”, etc.
Cuando los docentes realizan este tipo de preguntas en clase, no solo están atentos a lo que los estudiantes dicen; sino también a su lenguaje no verbal; ya que este también proporciona mucha información acerca de los participantes.
¿Cómo puede ayudar a tu hijo a estar listo para responder preguntas retadoras?
Las preguntas retadoras no solo están presentes en el aula, sino que tus hijos(as) la verán en diferentes momentos y situaciones de sus vidas; por eso, como padre, puedes ayudarlos en casa. Una forma de hacerlo es, por ejemplo, cambiando la forma cómo les formulas las preguntas que les haces cada día; por ejemplo:
- En vez de preguntarle “¿te fue bien en la escuela?” decirle “¿qué hiciste hoy en la escuela?
- En vez de preguntar “¿qué programa de televisión te gusta?” decirle, “¿por qué te gusta ese programa de televisión?”.
¿Está tu hijo listo para responder preguntas retadoras? Ayúdalo desde casa y nosotros desde la escuela. En nuestro centro educativo nos centramos en formar ciudadanos íntegros, creativos, de pensamiento crítico y propositivo.